Otra vez él. Lionel Messi volvió a marcar sobre el cierre para convertir un empate en victoria para un Barcelona que sigue peleando La Liga BBVA, algo que tiene más valor porque en la Champions League quedó al borde de la eliminación.

Lejos del no-festejo de la semana anterior ante el Alavés, esta vez Messi gritó con alma y vida su gol en el minuto 42 del segundo tiempo, que le permitió al Barcelona ganar 2-1 al equipo de Diego Simeone. Es el gol 22 en 22 partidos para Messi enfrentando al Aleti y, contra los Colchoneros acumula 27 conquistas.

Rafinha abrió la cuenta a los 18 del segundo tiempo para el Barcelona, cuando le sacó provecho a una jugada sucia en el área del arco que custodia el esloveno Oblak. Puso el 1-0 y el alivio para un Luis Enrique cuestionado que volvió a sentir la espada de Dámocles sobre su cabeza cuando Diego Godín se elevó y estampó el 1-1 a los 25 de la segunda mitad. 

Parecía que el empate iba a marcar la visita del Barcelona, que seguiría muy cerca del Real Madrid, que enfrenta más tarde al Villareal, pero sin poder superarlo.

El gol de Messi sirvió para ganar, sumar confianza de cara a la revancha con mucho de epopeya ante el PSG y para que el Blaugrana supere la línea del Merengue, que tiene dos partidos menos y, al finalizar el día, podría quedar por encima del elenco culé por una unidad, con un partido menos.